CRÍTICA DE LA PELÍCULA CON SPOILERS:
Bryan (Liam Neeson), un retirado espía del gobierno de Estados Unidos que hace todo lo posible por estar cerca de su hija Kim (Maggie Grace), cuando esta decide hacer un viaje a París con su amiga Amanda (Katie Cassidy) su padre se muestra totalmente en contra pero acaba cediendo, una vez en París Kim es secuestrada y metida en el mundo de la prostitución, Bryan tiene poco tiempo para rescatar a su hija pero tiene a su favor las "habilidades" que adquirió trabajando para el gobierno.
La película Venganza se estrenó en España el pasado verano recaudando muchísimo más de lo esperado en taquilla, pero es que además en Estados Unidos se esperaba que recaudara unos 45- 50 millones y ya supera los 100 y sigue subiendo ¿Por qué este éxito de una cinta que tiene un argumento tan trillado? Pues porque la sencillez de la película hace que la disfrutes y Liam Neeson se sale.
El inesperado éxito de la película reside en numerosos factores: no te da tiempo a aburrirte, quizá un poco al principio pero a partir del secuestro la cosa arranca y ya no para hasta el final, acción sin freno justificada por la desesperación de un padre que quiere salvar a la subnormal de su hija (sí, la hija es tonta, aunque desees que la encuentre y que esté bien es tonta perdida), Liam Neeson ofrece una gran interpretación y aunque en algunos momentos los palos sean un poco exagerados te lo crees, otro acierto de la cinta es la que para mí es una de las mejores escenas de secuestro de la historia del cine (vale, puede que exagere) sin duda lo mejor de la película junto con otra escena que comentaré después, ese momento de Maggie Grace viendo como alguien ha entrado en la casa y comunicándoselo a su padre por teléfono es angustioso y magistral a la vez, cuando ve que esos hombres se llevan a su amiga empiezas a ponerte nervioso, te pones en la piel de ese padre que no puede hacer nada, tan solo decirle a su hija a través del teléfono que se esconda debajo de la cama porque van a secuestrarla, repito, una escena grandiosa que te pone los pelos como escarpias, la otra gran escena de la película es casi al final, cuando Bryan descubre que han vendido a su hija (la venden porque es virgen, y por las vírgenes se paga mucho dinero, la amigita Amanda corre peor suerte) todos nos imaginamos que ha sido vendida al típico jeque árabe o al ricachón de turno, y así es, pero, la forma de hacerlo es cuanto menos escalofriante, ver como las chicas van desfilando medio drogadas y semidesnudas por delante de estos ricachones que pujan por ellas astronómicas cifras de dinero (como si estuvieran en una subasta comprando un cuadro) hace que desees con toda tu alma que Bryan se los cargue a todos y esto es lo que se llama meterse en la película, en mi sala de cine se oía a la gente animar a Bryan, se oían quejas e indignación ante esa "subasta" la gente se metió en la película, lo que hizo que el boca a boca la encumbrara. Otra cosa a resaltar es que lo da todo en su medida justa, no se queda corta pero tampoco se pasa, su duración de hora y media hace que que no te canses de la trama, te muestra el mundo de la prostitución sin llegar a ser rocambolesco, por ejemplo, Bryan encuentra a Amanda (la amiga de su hija) muerta en un antro de mala muerte, atada a una cama, drogada, violada... la encuentra así, tu no ves lo que le han hecho pero al ver su estado, su cara de sufrimiento hace que lo imagines y que lo pases aún peor que si te lo hubieran mostrado con imágenes, cuando Bryan captura a uno de los secuestradores de su hija lo ata a una silla y comienza a electrocutarlo, no muestran sangre, y aún sin mostrarla, la escena te estremece, igual todo esto hace que la película no caiga en lo desagradable para la vista sino que es desagradable para la conciéncia, se te estremece el cuerpo pero con estos detalles no se te estremece por el asco que te habría dado ver sangre a mantas o ver como violan a Amanda te estremece el pensar como habrá sido lo que le habrán hecho y eso es mucho peor.
Pero no to iban a ser cosas tan buenas, hay que advertir que la película carece de guión (el del secuestro es el único que merece la pena), Maggie Grace interpreta a una chica de 17 años y tiene 24, aunque intentan disimularlo, en la escena de la "subasta" da el cante, creo sinceramente que Bryan no debería haber encontrado a su hija, ese final feliz no me gustó nada, puede que sea un poco cruel pero es mi opinión.
En definitiva una película que entretiene muchísimo lo que hace que haya sido un taquillazo mundial.