El otro día hablé de Tru Calling, una serie cuya cancelación fue casi un drama para mí. Pues bien, hoy vamos con otra de esas cancelaciones que me fastidió bastante (aunque no llegó al nivel de dramatismo de Tru Calling), se trata de la serie The Class.
COMIENZAN LOS SPOILERS!!
The Class se estrenaba en Estados Unidos (a España nunca ha llegado) en el año 2006. La serie contaba la historia de Ethan (Jason Ritter), un joven que planea una fiesta muy espaecial para pedirle matrimonio a Joanne (Kassey Wilson) su novia de toda la vida. El chaval decide llamar a sus compañeros de clase del colegio, en concreto de cuando iban a tercer grado para que acudan a la fiesta y así poder verse tras 20 años separados y asistir a la pedida de mano. Seis excompañeros de colegio aceptan la invitación: Lina Warbler (Heather Goldenhersh) abandonada por su pareja pero que aún cree en el amor, Kat Warbler (Lizzy Caplan) hermana de Lina y borde a más no poder aunque oculta un gran corazón, Duncan (Jon Brental) el músico que aún vive con su madre, Kyle (Sean Maguire) el guaperas que resulta ser gay, Nicole (Andrea Andres) que acabó siendo el juguetito de un jugador de fútbol, Holly (Lucy Punch) periodista de éxito y Richie (Jesse Tyler) al que por el contrario el éxito no le sonríe.
Con tantos personajes y tan dispares era de esperar que la serie fuera divertida y disfrutable, cosa que es pero no del todo. El único motivo por el que seguí esta serie hasta su cancelación fue por los personajes de Ethan (Jason Ritter) y Kat (Lizzy Caplan), la relación de ambos es lo más destacable llegando a eclipsar al resto del reparto algo demasiado malo en una serie donde se supone que no hay un protagonista claro.
Está claro que la serie debería haber sido más de ellos dos, Jason Ritter me encanta, le tengo cariño aunque no llegue a ser uno de mis actores amados y Lizzy Caplan está genial en un personaje antológico, más borde imposible, super punzante, su humor es de lo mejorcito... ¿Habeis visto la personalidad de Veronica Mars? Pues así pero el triple. Las discusiones y los tira y afloja entre ambos te dan esa tensión sexual no resuelta que tanto nos gusta en las series. Un momento para recordar es cuando, en medio de la fiesta, Joanne le dice a Ethan que no, que no se casa con él y ante el asombro de todos Kat suelta "¡¡Esta es la mejor fiesta de la historia!!". En serio, merece la pena darle una oportunidad aunque solo sea por Ethan y Kat.
La audiencia no acompañó y finalmente la serie fue cancelada tras 19 episodios y dejando todas las tramas abiertas icluida la de Ethan/Kat que estaba en su mejor momento. La verdad es que fue una pena, no era la mejor serie del mundo pero sí mejor que alguna que otra que aún sigue en antena hoy día, al menos te divertias.